Sexting, consejos para el sexo a distancia
Hace no tanto tiempo, en cualquier periódico, podíamos encontrar una sección de contactos donde aparecían anuncios muy calientes. Los había de chicas que estaban dispuestas a darte un placer extremo en vivo y en directo, pero también unas líneas calientes a las que podías llamar a cualquier hora del día. Serías atendido por una chica con una voz melodiosa y sexy, que te hablaría de lo que llevaba puesto, subiendo poco a poco la conversación de tono. De esa manera, muchos hombres tenían una de sus experiencias más increíbles a través de un teléfono. ¿Es capaz de excitarnos tanto una simple conversación? Los asiduos a aquellas líneas eróticas pudieron comprobar que sin duda era así. El sexo telefónico se convirtió, de hecho, en una adicción para muchos, que lo consideraban un “mal menor” frente a estar con una prostituta. No engañaban a sus mujeres, no tenían que pagar tanto dinero, y el placer al final era el mismo… o casi.
Luego llegó Internet y dejó a casi todo lo demás anticuado. A los periódicos, a las líneas calientes y al sexo a distancia, aunque en este último caso, lo convirtió en algo mucho más especial. Gracias a las nuevas tecnologías, hoy en día podemos estar en contacto con nuestra pareja incluso a miles de kilómetros, con una imagen y un audio perfecto, para dejarnos llevar por la pasión. El sexting se está poniendo cada vez más de moda, y no solo entre parejas consolidadas, sino también entre desconocidos que tal vez solo haya coincidido una vez, o se hayan visto en Instagram. El sexting va desde los mensajes hasta las videollamadas, y puede ser más o menos explícito. Esto ya será cosa de cada cual, desde luego, pero de lo que no cabe duda es de que esta realidad se está haciendo cada vez más popular. Hay muchos hombres que tal vez no tienen tanta seguridad como para hablar de esas cosas con las chicas, pero por Internet sí que lo pueden hacer. Chicas que se dejan llevar mucho más a través de la pantalla que en vivo y en directo, algo lógico por otra parte…